Y eso que este, al menos para un servidor, imprevisible acontecimiento, a punto estuvo de dejarme en la calle sin poder disfrutar de lo que fue un excepcional concierto al que no le faltó ninguno de los ingredientes para tacharlo de gozada total, desparrame y lección de rock, country o folk and soul de mayúsculas dimensiones.
Finalmente un ángel de la guarda al que le sobró por vaya usted a saber que contrariedad, una entrada, me la vendió al precio de venta anticipada, además un caballero, gracias de nuevo.
Los que en alguna ocasión hayan tenido la dicha de plantarse ante este grupo ya saben a lo que se exponen: una catarata de sonidos abiertos, relampagueantes y cálidos; a una explosión de luz y de soul, de ecos continentales de sensible fibra y de folk, y de country y de rock y pinceladas de esa lírica propia de los poetas de la Telecaster (parafraseando a mi brother Joserra), y a un cantante sobresaliente, enérgico y al tiempo afinado, con una entrega que no traiciona su emisión ni sus agudos, como digo a un gran cantante: Danny George Wilson.
Y como la compañía no puede ser mejor, pues el traje sónico que al jefe le hacen los campeones del mundo es de tal enjundia que cada tema se alarga en una suerte de no quiero que se acabe esto: ya que tanto la base rítmica de irresistible pulso con Chris Clarke (bajo) y Steve Brookes (batería); como la legüeteante y sonora steel guitar de Henry Senior, las teclas de sensitivo academicismo de 'Free Jazz' Geoff y por supuesto la guitarra desbordante de clase y elegancia del magnífico Paul Lush forman un impagable ajuar que bien merece la pena la peregrinación hasta el paraíso montado al pie de su escenario.
El disfrute general, que lo hubo, vino marcado por un setlist apropiado, al que a un servidor le faltaron un par de favoritos, aunque este particular no empañó en absoluto la algarabía que provocaron temas de su último cancionero como: "Waiting for the right times", "Consider me", "Never in the moment", "Coley point", "Gotta get things right in my life", "It's just a game (that we were playing)" o la maravillosa "You'll remember me", que ahora mismo me vengan a la memoria
Por supuesto no faltaron recuerdos a discos pretéritos como "Every beat of my heart", "Henry the man", "Stay true", "This is not a love song", "(Never stop building) that old space rocket", "Clear water"...En resumen, una alegría vivir conciertos así, si además se está rodeado de amigos, mejor que mejor, es por ello, que una vez más, vivimos los más afortunados una gran noche de rock and roll.
Sana envidia socio, esperando que vengan por Barcelona.
ResponderEliminarMe pareció muy raro que no estuviese Barcelona ente las fechas de la gira, suele venir bastante, así que en la siguiente cita me imagino que pasará por allí.
EliminarSalud.
me alegra primero q haya un sold out. este año ya he tenido dos a ver si se multiplican por el bien de todos. Segundo tb me congratula dque los Chams tengan el sold out porq o merecen y tercero por lo escuchado y oido han estado de cine. Por el noroeste no sehan psasado asi q otra vez será
ResponderEliminarSiempre es de celebrar que grupos como Los Champs tengan reconocimiento, bandas que merecen lo mejor. Y desde luego su directo es magnífico y sus shows una gozada.
EliminarSaludos.
Danny y sus Champs son una delicatessen que eleva la calidad de nuestras vidas a los niveles de los elegidos.
ResponderEliminarSi duda, ha sido mi tercer concierto de ellos y siempre ha sido una gozada verlos.
EliminarGracias y un saludo.
Qué gustazo leerte. Cada concierto de esta gente nos hace mejores personas. Abrazos, mysuperfriend.
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