300 Entradas... Dictadas por el Corazón

¡Hombre! han pasado ya unos mesecitos desde que aquél 14 de enero de 2012 un acobardado y tembloroso Addison de Witt hacia trastabillar sus inquietos dedos por este teclado, este por el que ahora se muestran mucho mas serenos y experimentados, aunque igual de torpes en el fondo. Pero en aquel invierno lo hacian por primera vez, y lo hacian al son que el corazón marcaba, era la proclama: El corazón marca el ritmo, el tono, el tema y el sentido, el resto que lo haga el caparazón físico que uno como buenamente puede, saca adelante cada día, y que hace de espectro para ese corazón que tanto tiene de sabiduría y ganas de dar. Como tiene hambre no solo de alimentos sino también de emociones, de canciones, de belleza, de caricias en el terciopelo del cerebelo o de imágenes de plástica belleza solida o intangible, software o hardware ... no solo de pan vive el hombre.
Ha habido ocasiones donde este caparazón me ha jugado alguna mala pasada, escondiendo la llave de la prudencia y el decoro , dejándome quizás demasiado desnudo ante un mundo que con todos los problemas haciéndose sitio a codazos en nuestras entrañas, no han sabido asimilar ni entender tanta desnudez en alguien que parece que se cree único poseedor de arengas sensitivas en este planeta, egoísmo mezclado con terapia.


En otras, el excesivo nervio reaccionario de mi músculo sano (que diría Roth) me han llevado ha lanzar proclamas panfleteras que a buen seguro no habrán sido del agrado de todos ni tampoco del gusto, pero aquí si que es lo que hay.
No han faltado ocasiones en las que el corazón de un servidor, empecinado en volver la cabeza cada vez que al frente algo le asusta o le intenta negar la esperanza, o, ante el pánico a tener que gastar demasiada de esta vital materia prima de nuestras cada vez mas escuetas reservas, eterniza el giro hasta que las imagenes de ese pasado que siempre parece mejor de lo que fue y que acomodado a nuestra conveniencia circunstancial nos engaña; imagenes decía, que me hacen humedecer ojos y paladar en remembranzas hermosas y en el fondo vanas, solo recordadas por este débil corazón de mazapán al que el frió invernal al que nos acercamos en esta vida, convierte en un solido pedrusco dulce, eso si, dulce, pero también rígido, rigido como la voluntad de un esqueleto, rígido en el deseo de que todo sea como era, perfecto, ¿perfecto?... y se lanza a contar historias de ese pasado idealizado por mi esquelético órgano vital, que dejando en el cesto de la basura los malos rollos, que también los hubo, sonríe de tranquilidad y pasión.
Y sobre todo música, mucha música, ese néctar que al final es el culpable de que mi amigo corazón late, de que quiera latir, cuando mas pesadamente lo hace, siempre es la dama de las corcheas la que le alimenta a base de sonidos y le hace bailar, mover sus sangrientos pies, poner en movimiento a sus ejercidos a que recorran el castigado cuerpo de un Addison al que las arterias le piden ayuda, ayuda que no se si ya puede seguir prestando. Música guardada en esa vieja caja dorada y metalica que al abrirse lanza sus destellos de belleza enlatada junto a la grácil verdad de la bailarina, esa que vive imperterrita y fría en el joyero de la abuela, y que proyecta su sombra sobre alguna alhaja que ya ni nos acordamos qué debería recordarnos y que en otro tiempo supuso un enfrentamiento fratricida por su posesión en honor de no se que valor sentimental, valor tasado ahora a la baja en el mercado de esa exterminadora de sentimientos comunmente conocida como crisis económica y que se han inventado para dejar solas a las bailarinas de las cajas de música, para que estas, solo contengan en su interior tickets de tienda de empeños y resguardos de compra de preferentes.
Musica cedida desde el corazçon de otros seres como yo, perdidos en la red buscando la terapia de dar en lugar de recibir, que tando bien hace a veces al dador, que termina siendo mas egoista y avaro que el recibidor, pero tambien mas sano, noble y didactico.
Musica que me hace sentir el suelo bajo mis pies, el vino de la vida feliz en mi paladar, el vinagre de la verdad bajo la lengua, la sal de la soledad mezclada en la oscuridad de mis entrañas con la bilis, esa bilis, que despojada de alma, espera poder pudrir algo que en su dia fuese hermoso, pero que ya, perdida la juventud ha perdido la belleza que creiamos poseía y dejamos caer en las garras de la bilis, tan cercana al corazón, y que pasa los días tristes de negrura diciendole maledicencias al oido.
Sentimientos, musica, nuevos amigos, descubrimiento de alguno que lo creia y no lo es, nuevas formas de expresarme, experiencias y humillaciones intelectuales al ser en mas de una ocasión agredido por la brillantez de alguno de los destartalados corazones que armadura de oro en ristre pasean orgullosos su grandeza por las barras laterales de los blogs que dan vida y lustre a la blogosfera.
Todo ello en 300 reseñas, en trescientos arañazos alguno doloroso, otro placentero como esas autodestructivas escarificaciones que marcan para siempre el alma, el cerebro, el corazón... tan herido de sufrir, tan sanado de ir muriendo, tan feliz de compartir tiempo con todos los que aqui os acercáis, tan sano que ya no sabe latir.
Gracias a todos los que hacéis posible que ambos, mi corazon y yo Addison tengamos un rincon en el cual sentir que la vida es feliz y eterna. Eterna al menos mientras la última nota penetra por nuestra piel y nos regala con un nuevo arañazo que nos hace sentir eso...eternos.
Gracias por estar ahi y perdón por la chapa.






Comentarios

  1. Pues felicidades por esas 300 entradazas ... y upwards and onwards que dirian los superheroes!

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  2. Felicidades Addison, a doblar tocan y yo que pueda leerlo
    Saludos

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  3. Gracias a tí...y, como mínimo, otras 300 más, luego otras 300 y luego...

    Un abrazo gordo, Addison.

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  4. Muchas felicidades, amigo. Ya eres todo un veterano de la blogosfera, y te has ganado el cariño y el aprecio de todos los que pasamos por aquí.

    Enhorabuena, y que podamos disfrutar de muchos posts más.

    Un abrazo grande!

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  5. eric waits: muchas gracias camarada, somos heroes como diria Bowie somos heroes.
    Saludos.

    Chals: Doblaremos y tu lo leeras amigo mio, te lo aseguro.
    un fuerte abrazo.

    Coop: En eso estamos amigo, seguir con ilusión y alegria, muchas gracias...

    Evánder: Estoy lejos de las excelencias de vosotros los grandes pero seguiremos intentando mejorar y como dice aquel nunca convencer,
    un fuerte abrazo Evánder.

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  6. Un gusto leerte, Addison. Te envío mucha fuerza desde Carabanchel.

    Un abrazo, amigo.

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  7. La vida, como esas ciudades que no duermen, nunca se para. No es eso lo bonito?

    Me ha gustado este Colin Moore, no lo conocía!

    300 y a seguir ;)

    Besines

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  8. Me alegro que luego de tantos posts sigas activo.
    Esta bueno que gente como tu y varios mas escriban (ya escribir es mucho) sobre musica y sean parte de la manada de gente que apuesta a la mejora cultural.
    Segui asi que entre todos tal vez podemos hacer que la sociedad sea culturalmente inteligente e interesada

    Saludos!

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  9. Gonzalo: Se recibe y agradece esa fuerza, nos vemos en nada colega.
    Abrazo.

    Anna K: Y que no pare...
    Colin Moore es buenísimo, celebro que te guste.
    Gracias por estar ahi.
    Besos.

    Santiago: Muchas gracias por tus palabras tio, empiezas a ser un fijo en esta mi/tu casa, lo que me hace feliz sinceramente.
    Es una pequeña utopía eso que dices pero... ¿quien sabe?, igual lo conseguimos, aunque sea un poco.
    Saludos afectuosos y gracias de nuevo.

    Johnny: Gracias a ti Johnny, por todo.
    Abrazo de vuelta y grandote.

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